Más allá del Despacho Oval: Lecciones de planificación patrimonial de los presidentes de EE.UU. - Los presidentes que han servido a Estados Unidos han asumido una responsabilidad que supera lo que la mayoría de nosotros puede siquiera imaginar. Las decisiones que toman afectan a millones de personas para bien y para mal. Como estos líderes gestionan las complicadas necesidades de sus ciudadanos, se podría pensar que no tendrían problemas para gestionar sus asuntos personales, pero no siempre es así. El 19 de febrero es el Día de los Presidentes, lo que nos brinda una gran oportunidad para reflexionar sobre los éxitos y fracasos de algunos de los planes patrimoniales de nuestros anteriores presidentes.Más allá del Despacho Oval: Lecciones de planificación patrimonial de los presidentes de EE.UU.

Abraham Lincoln
La vida de Lincoln terminó de forma repentina e inesperada, por lo que probablemente no sorprenda que no tuviera un plan de sucesión cuando falleció. Tuvo que intervenir un juez del Tribunal Supremo para determinar cómo se dividiría el patrimonio de Lincoln entre su esposa y sus hijos vivos. No se sabe si el resultado se ajustó a lo que Lincoln deseaba para su familia. Nunca se sabe cuándo se va a fallecer, por lo que es esencial crear y mantener un plan de sucesión durante toda la vida.

George Washington
Puede resultar sorprendente saber que Washington era el patriarca de una familia mixta. Tenía hijastros y nietos por los que se preocupaba profundamente. Para asegurarse de que sus herederos recibieran todo lo necesario para vivir una vida feliz y fructífera, Washington fue meticuloso con su testamento. Como muchos de nosotros, Washington quería lo mejor para su familia después de su muerte. Mediante una planificación deliberada, podemos asegurarnos de que nuestro legado perdure a través de nuestros hijos, nietos y más allá.

Thomas Jefferson
La deuda es algo que afecta a casi todos los estadounidenses, incluso a nuestros presidentes. Nuestro tercer presidente, Thomas Jefferson, conocía demasiado bien los dolores de la deuda. Jefferson luchó con las finanzas y las deudas durante toda su vida. Después de su muerte, no disponía de mucho dinero para saldar sus deudas, por lo que la familia tuvo que vender sus tierras, dejando muy poco a sus herederos. Si Jefferson hubiera tenido un seguro de vida, podría haber saldado sus deudas con su póliza en lugar de pagar con propiedades y dinero en efectivo destinados a su familia.

Estudiar a nuestros ex presidentes es una excelente manera de descubrir la historia y aprender algunas valiosas lecciones de vida. Si quiere evitar algunos de los errores de planificación patrimonial que cometieron nuestros antepasados, ¡llámenos hoy mismo!

 

Andrea Shoup